jueves, 31 de octubre de 2013

Martillos, clavos y cefaleas

"Si la única herramienta que se tiene es un martillo, pensará que cada problema que surge es un clavo" Mark Twain

Creo que la frase anterior encierra una gran verdad. Lo cierto es que cuando uno ha encontrado una solución a un problema trata de establecer paralelismos en otros campos de actuación donde dicha solución pueda aplicarse de forma más amplia. Lo grave del caso es que esto muchas veces no se da y uno acaba aburrido de recibir martillazos en la cabeza por parte de miopes poseedores de martillos mágicos.

Hablando de Economía esto es bastante habitual: tenemos algo que funciona bien y pretendemos exportarlo a tooooooodo ámbito que se nos ocurra. Pongo algún ejemplo:

El libre mercado y la competencia funcionan muy bien suministrando algunos tipos de bienes. En general bienes privados físicos y muchos tipos de servicios son producidos y comerciados de forma muy eficiente en los mercados competitivos. Y funciona bien porque se trata de bienes de consumo excluyente (no son bienes públicos), producir cada unidad adicional tiene un coste (coste marginal) que además es creciente. En dichas condiciones los mercados suelen funcionar bien en general (obviemos por un momento el tema de las externalidades). 

Y como el mercado funciona bien en los bienes que son escasos (como las manzanas) hay quien pretende que otros bienes (como los ebook o los ficheros de música o películas) sean también escasos para poder aplicar las mismas soluciones. Los bienes que acabo de mencionar tienen un coste marginal (un coste de crear una nueva copia) cercano a cero, por lo que la solución del libre mercado no es válida. ¿Qué pretenden algunos? Establecer una escasez artificial penalizando la copia o restringiéndola para aplicar una solución que funciona EN OTRO PROBLEMA. El martillo... y el clavo.

Lo mismo pasa cuando hablamos de bienes públicos. A mí me empieza a cansar esa actitud paternalista que se respira sobre todo en ámbitos empresariales en los que los "expertos" en gestión empresarial tienen la solución para los problemas de la gestión pública. La producción de bienes públicos y en general la administración de la "cosa pública" es muchísimo más compleja que la gestión de una cadena de fruterías. Al final, cuando el gurú empresarial se equivoca cierra el chiringuito, pierde su dinero (o el de los que lo han contratado) y a otra cosa, mariposa. Pero esto no se puede tolerar con el dinero de todos, con el dinero público. No podemos organizar la Justicia de un país en torno a "empresas privadas" de justicia. No podemos "poner un precio" a los bienes públicos y SOBRE TODO, no podemos cometer el error que cometen todos ellos de llamar "cliente" a lo que es un "ciudadano". Y es que el cliente "siempre tiene razón", pero al ciudadano a veces hay que dársela y otras veces no. De nuevo el martillo.... con otra cosa que no es un clavo.

Y que no se me entienda mal: soy liberal hasta la médula. Creo en la libertad, incluida la económica, por encima de todo. Creo que hay que dejar que la gente se organice y ante la duda soy partidario antes del laissez faire que de la intervención. Creo que la intervención del Estado debe estar limitada y justificada. Pero creo que hay muchas ocasiones donde esas condiciones se dan, y hay que intentar buscar soluciones para los problemas, y no replantear los enunciados para tratar de aplicar recetas equivocadas.

martes, 22 de octubre de 2013

La falacia de la transmutación pecuniaria

Pietro Longhi 021
Alquimistas trabajando
De todos los razonamientos falaces que se hacen hablando de Economía tal vez el que más me molesta es el que acabo de bautizar como la falacia de la transmutación pecuniaria.

La falacia consiste en asumir que todas aquellas cosas que puedan expresarse en unidades monetarias (pecuniarias) pueden transmutarse las unas en las otras. Según esta falacia todo es un problema de dinero. Por ejemplo: con los 40.000 millones que España ha recibido para el rescate financiero se podrían comprar 200 millones de toneladas de trigo (a unos 200€/Tm) y solucionar el problema del hambre de África. El problema es que la cosecha de trigo mundial es la que es y 200 millones de toneladas suponen aproximadamente la cuarta parte de TODO el trigo del mundo... de modo que no podríamos comprarlo, o por lo menos no a ese precio. La cantidad de trigo hoy es fija y no podemos aumentarla a corto plazo ni con todo el dinero del mundo.

Si con las mercancías ya ocurre, ni digamos cuando hablamos de millones de euros para contratar personas, como si cualquier persona desocupada pudiese ocupar cualquier puesto de trabajo sin más. Por ejemplo, no podemos destinar los 40.000 millones anteriores a contratar 100.000 médicos... porque -si no lo he leído mal- "sólo" tenemos del orden de 16.000 profesionales sanitarios (entre médicos, personal de enfermería y farmacéuticos) en el paro. Aunque quisiésemos, esos son los que hay.

Son sólo ejemplos, pero es muy común traducir las magnitudes a dinero para después convertirlas en otra cosa nueva, como si fuese posible en una alquimia moderna convertir un millón de euros de plomo en un millón de euros de oro...

martes, 15 de octubre de 2013

Saldando deudas

Hace unas semanas tuve un intercambio de pareceres en Twitter con Jesús Zamora Bonilla y prometí exponer mis argumentos de forma más extensa en una entrada en este mi blog. Para centrar un poco la cuestión resumo rápidamente la afirmación de Jesús para proceder después a justificar mi crítica. 

Parece que Jesús estaba enfadado con alguien que opinaba en la tele sobre el informe PISA y que afirmaba que nuestro sistema educativo es un desastre "se mire por donde se mire". Jesús, no estando de acuerdo con quien hacía dicha afirmación, acompañaba el siguiente gráfico para argumentar que "Nuestra nota PISA responde exactamente a lo esperable con nuestro PIB".
 La recta de regresión pasa exactamente por encima del punto de España, hecho que Jesús utiliza para hacer la afirmación anterior. Mi contestación literal fue: "Uffff.... Sacar esa conclusión de ese gráfico es temerario cuando menos....".

No quiero discutir aquí sobre si me parece que el informe PISA es algo por lo que tengamos que flagelarnos o sacar pecho; hay gente mucho más capacitada que yo para analizarlo, desmenuzarlo y juzgar si Jesús tiene razón o no. Lo que yo quiero hacer en esta entrada es argumentar que un análisis de correlación y su recta de regresión simple dibujada sobre la nube de datos no permite hacer afirmaciones como la de Jesús. 

Para explicar mi punto de vista utilizaré un ejemplo numérico con datos inventados sobre un fenómeno para el que sabemos que existe una correlación: las personas más altas ganan salarios más altos. Imaginemos que tengo los siguientes datos de altura en cm. y salarios de 400 hombres:
En la gráfica anterior he destacado un punto (señalado con un circulito) que cae prácticamente sobre la linea. Según la lógica de Jesús, lo que dicha persona está ganando "responde exactamente a lo esperable" por su altura. 

Supongamos ahora que también tengo datos sobre el nivel de formación de cada una de esas personas. La siguiente gráfica representa los mismos datos que la anterior pero con una modificación: los colores de los puntos identifican distintos niveles educativos:

Los puntos de color rojo representan un nivel educativo bajo, los azules un nivel medio y los verdes un nivel superior. La remuneración salarial está también correlacionada con el nivel educativo observándose más puntitos verdes por la parte superior de la nube de puntos y puntitos rojos por la parte inferior. He vuelto a representar la recta de regresión global, pero también la recta de regresión para los individuos "verdes" (los de nivel educativo alto). La correlación entre su salario y su altura es prácticamente la misma (las rectas son casi paralelas), pero pasa por encima. He vuelto a señalar el mismo punto que antes estaba "donde le correspondía" según su altura y vemos ahora cómo está claramente por debajo de lo que le corresponde según su altura y su nivel educativo

En resumen: NO podemos sacar conclusiones sobre si un punto esta "donde le corresponde" ya que un estudio de correlación (lineal, para más señas) carece de capacidad predictiva. Básicamente nos dice en qué dirección se extiende la nube de puntos y poco más. 

Y con esto doy por saldada mi deuda respecto al tema. :D